viernes, 22 de enero de 2010

...

-¿Porqué a veces somos cursis?
Nadie dice nada.

NADA

Hoy tuve ganas de hablarte…
Te conté sobre el viaje que no hice.
Te conté sobre el cuadro que pinto.
Te conté sobre los cuerpos que toco y las palabras que ignoro,
Los trazos fallidos y los borrones recurrentes.


Te conté sobre espejismos en la orilla de mi abismo.
Te conté de aquel hombre que se quito la mascara,
Y de aquel hombre al que se la puse.
Te conté de las mañanas entre las sabanas, muriendo de frió.


Te conté mil cosas que yo no contaba, mil cosas que no importaban,
Mil cosas que llenaban los espacios de lo que no quería decirte,
Mil cosas…y no te dije lo importante.

Hoy tuve ganas de escribirte…
Y puse dos líneas en el papel. Dos líneas, y las borré.
Y tome el teclado y escribí un cuento.
Y tomé un papel y apareció un dibujo.


Lápiz, plumas, colores, papel y arena.
Palabras, líneas, imágenes e ideas.


Encontré el hastío y encontré una pluma.
Encontré mi hipocresía y encontré el valor.
Encontré la verdad y descubrí el cesto de basura.

Mil cosas…y no te dije lo importante.

Hoy tuve ganas de hablarte y tuve ganas de escribirte,
Pero ni te hable ni te escribí…
Hoy tuve ganas de verte y me quede aquí.
Hoy es ayer y mañana.


Ayer y mañana…lo importante sigue en el cesto de basura.

jueves, 21 de enero de 2010

Inexorable

17
Desesperados sueños.
Miré el reloj y ya era tarde, ¿Tarde para que? Para nada. La NADA me esperaba como siempre, ansiosa por robarme la insuficiente cordura.
La nada, mi refugio
La nada, mi realidad.
La nada, la negación.
¿En que hay más verdad, en los sueños o en la realidad?
Tomé un ultimo respiro antes de incorporarme, limpié el sudor de mi frente con mis manos y puse mis pies descalzos sobre el suelo frió y áspero, di dos pasos y algo golpeo mi cara. Debió ser la realidad, pensé, luego alcé la mirada y mi lámpara parpadeo por tres segundos, para luego apagarse […una intermitente imagen surgió en su mente… el filo de la lámpara incrustándose en su frente…]